El nombre proviene de la fisica de particulas, y describe un **estado formado por tres cargas elementales** —tres electrones o tres huecos que coexisten en equilibrio dentro de un mismo sistema cuántico—. A diferencia de una molécula o un átomo, el trión no tiene forma fija: **es una relación**, un campo de fuerzas que solo existe mientras las tres partes permanecen unidas. El modelo **Trion** toma esa idea de equilibrio tripartito como principio estructural. Tres ejes se proyectan desde un mismo centro, sosteniendo la pieza con una tensión simétrica. Las curvas se encuentran sin tocarse del todo, como si la estabilidad dependiera de una distancia precisa. La luz recorre esas intersecciones y deja ver la energía invisible que las mantiene unidas. En **Trion**, la forma no representa a la materia, sino al vínculo que la ordena. Una figura en reposo que encarna el movimiento constante de aquello que busca mantenerse entero.